miércoles, 30 de mayo de 2012

EE.UU. despliega una estrategia de pequeñas bases militares dentro de las zonas del narcotráfico en Honduras


El ejército de EE.UU. está desarrollando una nueva estrategia de infraestructura para luchar contra el narcotráfico en Honduras.


Honduras, con sus 112.492 KM2, es el segundo país centroamericano más extenso, superado sólo por Guatemala, pero tres veces más pequeño de los departamentos de Loreto en el Perú o Santa Cruz en Bolivia. Sin embargo, por la ineptitud y complicidad de sus gobernantes, es el país que más bases militares norteamericanas alberga considerando su tamaño diminuto. Aunque Panamá nos hace competencia con las 4 bases militares de los EEUU en proyección.




Los EEUU tiene 5.323 bases militares. De las cuales 4.500 están en su propio territorio y 823 bases en el resto del mundo. En Latinoamérica se encuentran cerca de 25 bases militares.


Honduras es el nuevo punto focal en la guerra contra las drogas, a medida que México pone presión sobre los barones de la droga de que usan su territorio como centro de tránsito. Así, más del 90 por ciento de la cocaína procedente de Colombia y Venezuela con destino a Estados Unidos pasa por América Central  y más de un tercio se abre camino a través de Honduras, que es un país con grandes áreas sin gobierno, y una de las más altas tasas de homicidios per cápita del mundo.

Tomando las enseñanzas de los conflictos en Irak y Afganistán el ejército de EE.UU. se está organizando en misiones de pequeñas dimensiones, con un número limitado de soldados, en alianza con militares extranjeros y fuerzas policiales que toman la iniciativa en las operaciones de seguridad, y con metas muy definidas, dirigidas a combatir a los grupos criminales. Han cambiado de bases gigantes a puestos dispersos en zonas remotas y hostiles, para que puedan enfrentar a los enemigos directamente en el terreno de operaciones.

Así opera con tres nuevas bases: una en la selva tropical, una en la sabana y uno largo de la costa – cada una en un lugar crucial para interceptar traficantes de cocaína que se desplazan hacia los Estados Unidos.

En cada base, la tropa tiene una casa pequeña y segura en el propio terreno de los insurgentes, con generosos tanques de combustibles y paneles solares para aumentar la generación, y a no más de 30 a 45 minutos de vuelo de la mayoría de los puntos de traspaso del contrabando.

Los funcionarios estadounidenses no pueden enfrentar directamente a los enemigos y están en carácter de apoyo de los militares hondureños.

Este nuevo modus operandi, descentralizado en pequeñas unidades insertas en el corazón del conflicto, tiene además la ventaja de ser mas barato en mantenimiento.

En Honduras, la base militar norteamericana permanente es la de Palmerola, Departamento de Comayagua, fundada en la década de los 50 del pasado siglo. Desde allí se ejecutaron todos los últimos golpes de Estado, incluyendo del 2009.


En abril de 2010, se estableció una segunda base militar norteamericana en Taracasta, Departamento de Gracias a Dios (frontera con Nicaragua). El argumento fue y es, proteger a Honduras del narcotráfico.


3 comentarios:

El país centroamericano más extenso es Nicaragua con un poco más de 130 mil kilómetros cuadrados. Por lo demás, interesante artículo. Les felicito.

Siguiendo con el comentario anterior Guatemala tiene 108.889km2, Honduras tiene 112.492km2 y Nicaragua tiene 129.494km2.

Les solicito a aquellos que comentan que se identifiquen ya que a partir de este momento no se aprobarán los comentarios que procedan del anonimato. Muchas gracias por su colaboración, pero, por favor, hágalo desde la luz. ¡Muchas bendiciones!

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