Stacey comenzó a hacerse adicta a estos alimentos altos en grasas saturadas para coleccionar los juguetes que regalan con los menús infantiles, que llegó a almacenar en cuatro bolsas de basura.
"Me gustaban tanto que era todo lo que comía", advirtió la joven. "Sólo podía comer eso y ni si quiera intentaba probar otros alimentos. Mamá dejó de darme nada más durante años". No obstante, la adolescente de Castle Vale (Birmingham), admite que de vez en cuando varía su consumo alimenticio (Pan tostado para desayunar o patatas fritas). Sin embargo, después de su ingreso en el hospital, ha admitido que la dieta tiene un impacto negativo en su salud. "Estoy empezando a darme cuenta de que esto es realmente malo para mí", admitió. "Mi comida principal se fundamenta en nuggets de pollo todos los días".
“Los nuggets de pollo son mis favoritos. Los comparto con mi novio así como las patatas fritas”, asume la joven recientemente ingresada por un colapso, sufrir problemas respiratorios, un desmayo y tras haber estado a punto de morir, según recoge el diario The Daily Mail.
Una de las razones menos graves por las que Stacey empezó a comer este tipo de comida, es por los juguetes que regalan en los menús infantiles. “Llegué a almacenarlos en cuatro bolsas de basura”, asegura.
La madre de Stacey, Evonne, lucha ahora junto a un especialista para que su hija empiece a comer una dieta mucho más sana, equilibrada y variada, tras la negativa de la misma por contribuir. ”La he dicho en más de una ocasión que morirá si continúa así”, explicó Evonne, de 39 años de edad, pero agrega que ”Stacey dice que no puede comer otra cosa. Me rompe el corazón verla condenada a ese tipo de comida”.
Por su parte, la nutricionista encargadadel caso de Stacey, Carina Norris, le dijo el doctor que “durante sus diez años de experiencia nunca se ha encontrado con un caso similar“. La especialista asegura que la dieta de la joven tendrá serias implicaciones a largo plazo en su salud ya que su cuerpo se carece de hierro, calcio, antioxidantes, vitaminas y grasas buenas. “Debe entender lo que le ha ocurrido a modo de una serie advertencia y cambiar drásticamente su dieta”, subraya.
“Las frutas y verduras son parte fundamental de nuestra dieta. Sin ellos se aumentan las posibilidades de desarrollar enfermedades crónicas como enfermedades cardíaca y cáncer. Por eso, cuanto antes se eduque a los niños en una dieta alimenticia equiolibrada, antes cogerán los buenos hábitos”, asegura la nutricionista.
Norris termina asegurando que “hay que tener mucho cuidado con los alimentos altos en grasas saturadas, como es el caso de estos productos de comida rápida”.
Stacey Irvine con los juguetes de Mc Donalds
Un informe y análisis de esta convulsión juvenil por la comida chatarra.
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