Es por eso que muchas embarazadas que se encuentran al límite de la gestación concurren en masa a los centros de salud con la intención de adelantar el parto para poder cobrarlo, indicó el diario El País. "Mientras no haya contraindicación, puede hacerse", señaló un especialista. "Hay muchas embarazadas que tienen previsto el parto para la primera quincena de enero y estan haciendo los tramites para inducir el parto antes que empiece el año.
La Asociación Española de Matronas denunció esta situación y advirtió de que la cesárea "multiplica por siete" el riesgo de muerte materna. La presidenta de esta asociación, Ángeles Rodríguez, recordó que no conviene "asumir riesgos innecesarios" y que el riesgo de someterse a un tratamiento de inducció o una cesárea innecesaria no se compensa con 2.500 euros.
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